El uso de un marco de gestión del cambio anima a las personas afectadas a adaptarse a un nuevo proceso y aumenta el éxito de la implementación.
El cambio rara vez se recibe con entusiasmo. Generalmente, la primera respuesta es mediocre, ya que se requiere de esfuerzo para desaprender lo que es cómodo.
Por ejemplo, cambiar de plataforma de informes de gastos puede parecer un cambio sencillo. Sin embargo, es probable que haya algunos momentos frustrantes al aprender dónde se encuentran las funciones comunes en un nuevo panel. Se necesita tiempo para reconfigurar el cerebro, y si el nuevo proceso no es intuitivo, existe una mayor probabilidad de que a los empleados no les guste el cambio.
Cuando un líder utiliza un modelo de gestión del cambio, le permite anticipar la resistencia y establecer un plan para guiar a su organización hacia una implementación exitosa.
¿Qué es la Gestión del Cambio?
La gestión del cambio es un marco para ejecutar un cambio interno o externo significativo en sus procesos, cultura, tecnologías u otros aspectos operativos críticos. Más específicamente, la gestión del cambio se centra en el lado humano del cambio.
"Se trata de adelantarse al cambio para que todo el equipo pueda abordarlo de manera efectiva en lugar de limitarse a liderar desde arriba. Se necesita iniciativa y desafiar el status quo antes de ser víctima de él", dice André van Hall, orador y autor de "La curiosidad del cambio".
Asimismo, Dave Collins, fundador y director ejecutivo de Oak and Reeds, divide la gestión del cambio en dos categorías:
Las competencias de liderazgo necesarias para guiar a las personas a través del cambio.
Las habilidades de liderazgo necesarias para liderar equipos u organizaciones a través de una transformación.
"Liderar a las personas requiere inteligencia emocional y comprender cómo el cambio altera los patrones de las personas de manera diferente. A nivel organizacional, se trata de entender cómo ser estratégico y elaborar un plan de ejecución y comunicación" - Dave Collins
El cambio es inevitable. El mundo cambia continuamente y las empresas deben evolucionar para lograr sostenibilidad y crecimiento. Al gestionar el cambio, puede estar al tanto de los cambios internos o externos en lugar de sorprenderse por ellos.
Si bien el cambio puede ser doloroso, los resultados pueden mejorar los flujos de trabajo para mejorar las experiencias de los empleados, reducir los gastos del proyecto, mejorar la cultura empresarial, mitigar el riesgo y aumentar la capacidad de la organización para superar obstáculos.
Recuperado de: Vistage– “What leaders need to know about change management” por Vistage Staff
3 pasos a seguir en el proceso de gestión del cambio
Un plan de comunicación sólido es fundamental para implementar el cambio. Estos tres pasos te ayudarán a guiar los detalles contenidos en ese plan.
1. Haga una lista de todas las partes interesadas
Según Collins, muy a menudo los líderes dejan de lado a una buena parte de las personas interesadas que no son inmediatamente obvias, especialmente ahora que la fuerza de trabajo puede llegar a estar dividida por el trabajo remoto / híbrido, donde se pueden incluir a subordinados directos, personal de TI, clientes, socios multifuncionales, proveedores, y hasta la familia.
2. Responda dos preguntas clave de las partes interesadas
¿Qué tienen que hacer como parte de este cambio?
¿Qué ganan ellos si el cambio tiene éxito?
Es fundamental para crear una campaña de comunicación coordinada identificar y organizar las prioridades, aquellos factores críticos que deben cambiar y sobre todo la razón por la que se debe dar el cambio.
3. Reconocer que se está produciendo un cambio en lugar de pretender que todo sigue como de costumbre
No es de utilidad ni de beneficio para la empresa que sus miembros no reconozcan la necesidad de un cambio, especialmente cuando este ya está en marcha. Es vital reconocerlos y ser parte de su implementación. El líder debe compartir información temprano y con frecuencia, no acumularla, especialmente si son noticias difíciles que requieren un mayor tiempo para ser procesadas.
El cambio, incluso con una buena gestión, es difícil. Pero siguiendo estos pasos, los líderes pueden ayudar a limitar la resistencia y generar impulso para aumentar las posibilidades de una implementación exitosa. Una vez el cambio sea aceptado, también hay que permitir que las mismas personas lo implementen y personalicen, ya que con ello pueden surgir nuevas formas de aplicarlo que no se habían concebido en un inicio.
Recuperado de: Vistage– “What leaders need to know about change management” por Vistage Staff
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